Éxtasis
Lamentablemente, el éxtasis es una de las drogas más populares entre los jóvenes de hoy en día. La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito estima que hay aproximadamente 9 millones de consumidores de éxtasis en todo el mundo.
La gran mayoría de los consumidores son adolescentes y adultos jóvenes.

¿Qué es el Éxtasis?
El éxtasis fue desarrollado originalmente por la empresa farmacéutica Merck en 1912. En su forma original, se conocía como «MDMA». En 1953, el ejército estadounidense lo utilizó en pruebas de guerra psicológica y, posteriormente, resurgió en la década de 1960 como medicamento psicoterapéutico para «reducir las inhibiciones». No fue hasta la década de 1970 cuando el MDMA comenzó a utilizarse como droga recreativa.
Píldora del amor imaginaria sin máscara. El éxtasis se conoce a menudo como «la píldora del amor» porque intensifica la percepción de los colores y los sonidos y, supuestamente, amplifica las sensaciones cuando se toca o se acaricia a otra persona, especialmente durante las relaciones sexuales.
Pero el éxtasis suele contener alucinógenos, que son drogas que actúan sobre la mente y hacen que las personas vean o sientan cosas que en realidad no existen. Los alucinógenos pueden sumir a una persona en una experiencia aterradora o triste del pasado, en la que queda atrapada sin siquiera darse cuenta.
Consecuencias del consumo de Éxtasis.
El éxtasis amortigua las señales de alarma naturales que emite el cuerpo. Como resultado, tras consumir la droga, el individuo corre el riesgo de sobrepasar sus límites físicos y su resistencia. Por ejemplo, una persona que ha consumido éxtasis puede no darse cuenta de que se ha sobrecalentado y puede desmayarse o incluso morir por un golpe de calor.
Un estudio realizado por el Centro de Investigación en Trabajo Social de la Universidad de Texas reveló que los efectos a largo plazo del éxtasis más frecuentemente reportados incluyen depresión y una reducción de la capacidad de concentración. Los investigadores también descubrieron que el consumo repetido de éxtasis está asociado con trastornos del sueño, del estado de ánimo y de ansiedad; temblores o espasmos; y problemas de memoria.
EFECTOS A CORTO PLAZO
Deterioro del juicio
Falsa sensación de afecto
Confusión
Depresión
Problemas para dormir
Ansiedad grave
Paranoia
Ansia por consumir drogas
Tensión muscular
Deseos y escalofríos o hinchazón
Apretar los dientes de forma involuntaria
Visión borrosa
Náuseas
EFECTOS A LARGO PLAZO
Daño cerebral duradero que afecta al pensamiento y la memoria.
Daño en partes del cerebro que regulan funciones críticas como el aprendizaje, el sueño y las emociones.
Es como si el centro de control del cerebro se hubiera destrozado y luego se hubiera reconectado al revés.
Degeneración de las ramificaciones y terminaciones nerviosas.
Depresión, ansiedad, pérdida de memoria.
Insuficiencia renal.
Hemorragia.
Psicosis.
Colapso cardiovascular.
Convulsiones.
Muerte.
